WORLD PRESS PHOTO 2006

Cada fotografía es una realidad diferente. Con un solo flash es impresionante cómo se pueden captar no sólo imágenes, sino que también sentimientos como angustias, alegrías y temores. Desde triunfos deportivos hasta las peores guerras de estos últimos años donde la crueldad es parte de la vida de muchos inocentes se ven reflejados en la World Press Photo 2006.

Dentro de las más impresionantes está el fotorreportaje de una mujer que tiene cáncer de mama. En seis fotografías logra expresar lo que significa sufrir una de las enfermedades que, en las mujeres, provoca más muertes alrededor del mundo.

Pero no sólo muestra la enfermedad en sí, sino que es capaz de relatar el camino para lograr su recuperación o morir en el intento. Empieza cuando pierde el pelo. Luego esta mujer pasa por los tratamientos, que con solo ver en su rostro, uno se da cuenta de lo doloroso que es. Las siguientes fotografías relatan la pérdida de uno de sus senos y finalmente cómo sale adelante y recupera su vitalidad.

Tal vez por ser mujer causó en mí un mayor impacto. Quizás por saber que estamos todos propensos al cáncer. O pudo ser el que gente que quiero ha muerto a raíz de esta enfermedad. Cuántas veces hemos visto a personas sufriendo por esto y nosotros nos sentimos alejados y pensamos: “No, esto a mi no me va a pasar”. ¿Acaso somos Dios que no corremos riesgo alguno?

¿Por qué tiene que morir alguien famoso, como la cantante colombiana Soraya, para que las mujeres tomen conciencia? No sé, pero de lo que sí estoy segura es que no debemos esperar a estar desahuciadas para preocuparnos. Al contrario, periódicamente hay que hacerse los chequeos médicos y así evitar llegar demasiado tarde cuando no hay nada que hacer.

También debo rescatar la valentía que tienen las personas con cáncer para enfrentar una situación como esta. Los superhéroes se quedan cortos en valentía al lado de ellos. Siempre me he preguntado, cómo es levantarse diariamente sabiendo que quizás sea tu último amanecer.

Aparte de esta fotografía hubo otras que también llamaron poderosamente mi atención, en especial la que refleja la muerte de un infante de marina norteamericano, James Cathey. En ella muestra cómo vive la familia el luto de una persona que dio todo por su país.

La más fuerte de esta secuencia, para mi, es en la que aparece la mujer del soldado embarazada, apoyando su vientre en el ataúd. Acaso el Presidente de Estados Unidos irá en el futuro a decirle al hijo de Cathey: “Lo sentimos, pero las ansias de poder es más importante que la vida de tu padre”. No, y aunque así fuera, ¿de qué le sirve?

No existe consuelo alguno que logre disminuir la pena que siente la familia. Sus padres, amigos, esposa y hermanos no necesitan una medalla de honor por la valentía. ¿Por qué mejor no va George Bush a Irak y enfrenta la guerra?

Los Presidentes valientes sólo existen en las películas como en Superman 2, donde el Mandatario se entrega a Lex Luthor y a los sobrevivientes de Kripton a cambio de que liberen a la nación.

Exposiciones así hacen que uno debata sobre estos temas, pero es de esperar que no queden en simples cuestionamientos, sino que cada uno de nosotros, desde su metro cuadrado, pueda hacer algo para revertir situaciones como las que refleja cada una de las fotografías de la World Press Photo.

Viviana Coloma A.